El famoso médico abortista estadounidense, George Tiller, ha probado de su propia medicina. No volverá a abortar; no volverá a matar; no volverá a asesinar a niños inocentes, criaturas débiles y pequeñas a las que Tiller sesgó sus vidas durante tantos años. Hoy, por fin, sus sangrientas manos dejarán de cometer crímenes.
La noticia, aquí
La noticia, aquí
Lo que es de risa es que este tipo de gente vaya a misa...
ResponderEliminar"Quien a hierro mata a hierro muere"
Bueno, esas "misas" luteranas de nada sirven. Es como ir al cine o al teatro.
ResponderEliminarOjala ahora muchos niños se vean libres de las garras del aborto.
La noticia ha escandalizado hasta a Obama. Y nadie de tiras de los pelos por los miles y miles de niños asesinados cada día.
ResponderEliminarEl que juega con fuego se acaba quemando. Y éste ha salido ardiendo.